lunes, 23 de marzo de 2009

Bohrcafé Conquista con el Servicio

Tomado de La Guia del Cafe
Marzo 6, 2006

: : Juan Pablo Bohórquez tiene claro que no hay mejor vendedor que el dueño de la empresa. Con delantal, una sonrisa y mucho servicio al cliente ha logrado abrirse paso y conquistar exigentes paladares. : :

A Juan Pablo Bohórquez, un arquitecto santandereano de 29 años, especialista en mercadeo y finanzas, es común encontrarlo en un evento con delantal puesto atendiendo un stand en el que prepara el más selecto café colombiano. Según él, esa ha sido una buena estrategia para dar a conocer su empresa Bohrcafé.

“Los colombianos no exigimos que nos den buen café porque ni siquiera lo conocemos, explica Bohórquez. Él, que proviene de una familia que se ha dedicado por más de dos generaciones al cultivo y exportación de café verde, decidió crear su propia marca cuando aún era estudiante de arquitectura, con el fin de que en el país los consumidores tuvieran la oportunidad de disfrutar un producto final tipo exportación.

En esa época, compró una tostadora y vendía el café tostado entre sus amigos. Cuando realizó su especialización se dio cuenta de que definitivamente lo que quería era producir café molido, con un sabor almendrado genuino. Para ello, lo primero que hizo fue identificar el mercado al que quería llegar.

“Yo sabía que mercadear mi producto no iba a ser fácil porque aquí nos han acostumbrado a tomar un café barato y malo. No sabía tampoco si la gente optaría por comprar un producto de calidad, pero algo costoso: media libra valdría entre 7.000 y 9.000 pesos. Por eso me decidí por el mercado personalizado; por llegar puerta a puerta, permitiéndoles a los clientes que antes de hacer un pedido disfrutaran de lo que es una buena taza de café, comenta Bohórquez.
Pero antes de salir al mercado buscó que el café tuviera una identidad y que este respondiera a su principal objetivo: posicionar a Bohrcafé como la mejor marca de café colombiano. Para ello, él mismo diseñó empaques modernos y atractivos, cajas de madera decorativas, sellos e instrucciones sobre su preparación.

Aunque Bohórquez confiesa que el público objetivo son los estratos altos, gracias a la forma de promover su producto ha podido llegar a gente de todos los niveles sociales. Y todos ellos, al probar la calidad de su café, no dudan en comprarle por lo menos una bolsa.

A conquistar el mercado“Yo comencé con las uñas. Primero les ofrecí el café a los papás de mis amigos y después tuve que ampliar el mercado. Empecé a venderlo en las heladerías Cremas de Bucaramanga. Después me trasladé a Bogotá y allí, a través de los Delikatessen, abrí mercado. Posteriormente empecé a participar en eventos y en oportunidades llegué hasta algunas ferias de pueblo, asegura.

Cuando Juan Pablo asiste con su stand a seminarios y encuentros, en muchas oportunidades no lo hace a nombre propio sino de compañías como la ETB, Colmena o Fidubogotá que, gracias a esta estrategia, ven siempre abarrotados de personas sus sitios de promoción. De paso, los curiosos visitantes se enteran de la existencia de Bohrcafé.

“Para llegar a la ETB me tardé más de dos años, hasta que logré que conocieran mi café. Lo mismo que he hecho con otras compañías, primero les ofrecí el producto para que ellas se lo regalaran a clientes como material P.O.P. (de promoción). Más adelante, optaron por llevar a Bohrcafé a los eventos, recuerda.

Tiene claro que su producto no es para venderlo en la góndola de un supermercado. De hecho, no está interesado en penetrar a las grandes superficies: “mí café es para venderlo de tú a tú, dice. Por eso ha tomado varios cursos sobre preparación, lo que le ha permitido, además de atender su propio puesto de degustación, convertirse en proveedor de hoteles, restaurantes y casas de moda.

A los administradores de esos lugares, les parece bastante atractivo que Bohórquez no sólo les venda el café, sino que los asesore en la forma de prepararlo; que les enseñe a hacer la carta de cafés para los clientes y, como si fuera poco, les colabore con el mantenimiento de las máquinas que se utilizan para prepararlo.

Adicionalmente, cuenta en Bucaramanga con tres tiendas propias donde promociona su café. La meta en un futuro próximo es fundar su primera tienda en Bogotá.

Su propio ingenioAunque Bohrcafé actualmente es distribuido en ciudades como Bogotá, Medellín, Cartagena y Bucaramanga, la producción se sigue haciendo en esta última. Bohórquez cuenta con cinco personas en planta y la colaboración de su familia. “Yo le compro el café a mi papá porque sé de la calidad de su producto. El secreto para que uno se pueda tomar una deliciosa taza está en contar con buena materia prima y saberla preparar, asegura.

Juan Pablo es el típico gerente pyme: ha diseñado los empaques, logos y mostradores del producto. Él también es el que visita a las empresas y los almacenes; él lleva los pedidos, asesora a sus clientes y atiende su stand en los eventos. “A veces siento que me hace falta una secretaria. Quizá si tuviera más colaboradores, tendría más clientes. Pero también sé que parte del éxito de mi producto depende de que los compradores tengan contacto directo conmigo, sostiene.

Agrega que este contacto también es fundamental para seleccionar buenos clientes y garantizar el pago oportuno de los pedidos que le hacen. Para ello, su estrategia es que antes de la venta prefiere hacerse amigo de los futuros compradores, enseñarles a preparar el café y finalmente concretar el negocio.

El año pasado, Bohórquez logró vender 12.300 libras de café, lo que le representó ingresos por 170 millones de pesos, sin contar lo producido por sus tiendas y el material P.O.P. que vende a otras compañías.

Entre los proyectos que tiene para el futuro está el de penetrar mercados externos. Para tal fin, ya ha enviado muestras de su producto a Japón, Rusia, Estados Unidos y Marruecos; con este último país ya está concretando negocios. Para este año también busca aumentar el número de eventos a los que asistirá y espera seguir brindando personalmente a sus clientes lo más selecto del café colombiano.

Actualmente es proveedor de los Famosos Restaurantes Andres Carne de Res y Sopas y Postres de la Abuela

martes, 10 de marzo de 2009

Financiaremos un Buen Proyecto Nuclear si nos lo Presentan

Tomado del diario ABC


Colaborador del ex ministro de Economía Carlos Solchaga, Maurici Lucena Betriu (Barcelona, 1975) fue uno de los cerebros escogidos por el hoy ministro de Industria, Miguel Sebastián, para la elaboración del programa económico del presidente Rodríguez Zapatero en 2004. Desde entonces, ocupa el cargo de director general del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) cuyo presupuesto ha duplicado en poco más de cuatro años, disparando la cartera de proyectos un 44%. Unas cifras que le convierten en uno de los artífices del «milagro» de la innovación española, como reconoció en julio la Agencia Espacial Europea (ESA) al convertirle en su primer presidente español. Hoy, desde ambos cargos, analiza el futuro de la I+D española ante los desafíos que plantea la crisis.


¿España ha tocado techo o hace falta mantener el esfuerzo público en innovación?


En la pasada legislatura el esfuerzo presupuestario a la inversión en I+D se multiplicó por 2,3 y para esta legislatura sigue siendo una prioridad, pero no vamos a poder mantener los incrementos presupuestarios vistos en la última legislatura. Ya hemos alcanzado un volumen de fondos razonable para el puesto que la economía española ocupa en el mundo, y lo que debemos hacer es elevar la eficiencia del sistema de ayudas.


Entonces, ¿la inversión de España en I+D es la adecuada?


No digo que el nivel sea el adecuado sino que el volumen público es significativo. No está claro que sea necesario incrementar mucho más el esfuerzo inversor público, sino mejorar el diseño de los programas de financiación, los procesos de evaluación y el seguimiento de las ayudas concedidas.


AETIC, patronal de las «telecos», dice que si el aumento de las ayudas se reduce, España perderá lo ganado...


No corremos ese riesgo. AETIC defiende sus intereses y el Gobierno debe velar por el interés general. En un momento de restricción presupuestaria como el actual, lo que debe hacer el Estado es seleccionar y priorizar muy bien el gasto. Y no tengo claro que las quejas de AETIC estén justificadas, viendo el incremento fortísimo del gasto público en I+D que se ha destinado a ese sector. De todas formas el programa de referencia de este sector es el programa Avanza y ése lo gestiona el Ministerio de Industria, con lo que poco puedo dar aparte de mi opinión.


¿No cree que el Plan E ha sido la oportunidad perdida para dotar a España de una nueva economía de la innovación?


Indudablemente, desde el Ministerio de Ciencia e Innovación nos hubiera gustado que la I+D tuviera mayor peso en el Plan E, pero nos han asignado 500 millones «extra» que están muy bien. Creo que muchos economistas están hablando de manera precipitada y sin conocer la naturaleza de la crisis. Lo que hay que preguntarse es qué previsiones de crecimiento tendríamos si no se hubiera lanzado el Plan E.


¿Serían inferiores?


Ni se sabe cuánto. No sólo por la caída del PIB sino por la desconfianza que se hubiera generado en los agentes. Me considero un economista muy ortodoxo y estoy de acuerdo en que las medidas de política fiscal discrecional como el Plan E tienen sus riesgos, porque pueden llegar tarde. Sin embargo, esta crisis es de tal magnitud que el Plan E es totalmente oportuno y va a venir perfecto. Sería una irresponsabilidad del Gobierno no haberlo aprobado.


¿No cree que en 2010 hará falta otro plan de estímulo?


No lo sé. Soy de los optimistas y creo que si no hay más sorpresas, que no cabe descartarlas, el sistema financiero debiera normalizarse a finales de año y cuando eso ocurra estaremos preparados para hablar de la recuperación de la recesión.


Hasta entonces, ¿qué pasará con la innovación?


Desde una perspectiva tecnológica, el problema no es la recesión sino el estado del sistema financiero. Es muy difícil saber lo que va a pasar con el esfuerzo innovador y yo lo que veo es mucha incertidumbre. En el caso español existen esquemas de incentivos públicos con una generosidad que nunca había existido, y en el caso de las empresas creo que todas han asumido la necesidad de innovar como fuente principal de la competitividad, pero está por ver lo que va a ocurrir.


Supongo que los bancos también han cerrado el grifo para el sector de la innovación...


El momento actual es muy complicado para las empresas en nuestro ámbito de actuación, porque quien más y quien menos tiene dificultades serias de financiación: las empresas tienen más dificultades que en el pasado para devolvernos los préstamos y también para complementar las ayudas que les damos. En valores absolutos, la cartera de peticiones del CDTI no se ha resentido, pero claro que lo notamos.


Con este saldo, casi podemos apostar a que veremos descender el esfuerzo innovador en las empresas españolas...


Realmente no sabemos cómo evolucionará, ni qué pasará con la inversión de las empresas en I+D. Aún está por ver si prevalecerá el efecto de la crisis o el esfuerzo en innovación. España es un país muy maduro y confiemos en que prevalezca la inversión en I+D+i porque ninguna empresa con cierto tamaño y vocación de permanencia ignora su importancia.


Entonces, ¿el riesgo está en las pymes?


No hay duda de que una pequeña empresa recién creada, que haya basado sus ingresos en la innovación, tiene ahora más problemas, porque se encuentra con mayores dificultades que un grupo grande para la renovación de sus pólizas de crédito. Pero, por eso, nosotros hemos hecho hincapié en este nicho durante los últimos meses. Intentamos que nuestra ayuda siga siendo la misma independientemente de las condiciones de mercado. Y eso, en la actual situación, significa mayor flexibilidad a la hora de pedir avales o anticipar dinero a las empresas.


¿Veremos nuevas medidas de apoyo a la innovación privada en próximos meses?


Hemos hecho muchas cosas ya y la ministra Garmendia ha insistido mucho en este tema. De forma general, hemos retirado la exigencia de una proporción muy alta de garantías, elevado los anticipos de dinero, y agilizado una línea de financiación con bancos elevando su margen de intermediación. Por ejemplo, en el programa Cenit hemos retirado los avales; entregamos el dinero y sólo lo reclamamos si no se realiza lo pactado. Además, hemos bajado el umbral mínimo por proyecto hasta 15 millones y reducido el umbral de subcontratación a centros de investigación. También tenemos ahora hasta 70 millones para proyectos tecnológicos de pequeñas empresas a las que no pediremos garantías cualquiera que sea la evaluación financiera...


La nueva ley de la Ciencia creará una nueva agencia de financiación para innovación, ¿cómo le afecta eso al CDTI?


Bueno, ahora lo que existe es sólo un borrador que debe discutirse internamente en el Gobierno y pasar por el Congreso. En la tramitación puede cambiar bastante. No obstante, el borrador lo que recoge textualmente es la existencia de dos agencias de financiación, de las que una será el CDTI que seguirá financiando la I+D empresarial. La otra agencia será de nueva creación y sólo se dedicará a financiar la I+D científica básica. Y donde exista una barrera difusa debería haber una cofinanciación.


¿Financiaría un proyecto de innovación en el ámbito de la energía nuclear?


El CDTI no puede tener ningún juicio «a priori» sobre ningún área y si se nos presenta un proyecto de innovación nuclear bueno, lo financiaremos. De hecho, entre 2004 y 2008 el CDTI ha apoyado 13 proyectos en el ámbito de la energía nuclear, la mayoría centrados en mejoras de la seguridad e inspección de las centrales. Hay que separar de nuestros objetivos las prioridades que establece Industria para la política energética.

lunes, 2 de marzo de 2009

En Colombia, las Mujeres Crean más Empresas por Necesidad que los Hombres

Tomado del Diario Portafolio

Es una de las conclusiones de un estudio realizado en 41 países, incluidas naciones latinoamericanas como Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela.

Se trata del 'The Global Entrepreneurship Monitor (GEM) 2007 Report on women and Entrepreneurship Released', que en Colombia hacen la Universidad de Los Andes, la Javeriana de Cali y la Universidad del Norte, en Barranquilla.

De acuerdo con Jorge Enrique Jiménez, profesor de la Universidad Javeriana y coordinador del estudio en el país, en nuestro caso particular, el nivel alto de creación de empresas es natural, pero mientras unas se crean por oportunidad, en otros casos son resultado de la necesidad.

"Son las mujeres las que crean más empresas por necesidad que los hombres. Mientras 49 por ciento lo hacen por esa razón, el porcentaje masculino solo alcanza el 36 por ciento", afirma el experto. En cuanto a la edad, la mayoría de empresarios está entre los 25 y los 44 años.

Con todo, en el país las mujeres se encuentran en desventaja en el campo laboral, porque el salario que reciben es menor y no cuentan con el apoyo suficiente para hacer empresa. "No tienen capital social no económico para poder crear negocios. Así que están en desventaja tanto en el campo laboral como en el empresarial", agrega Jiménez, magíster en gerencia.

El experto señala que no hay diferencias significativas entre hombres y mujeres en generación de empleo y de empresas. Sin embargo, las circunstancias de ellas son distintas. La creación de empresa es una opción para cumplir con su rol de madre y tener desarrollo profesional y personal.

La tendencia a crear empresa no es un asunto familiar en Colombia. "En el estudio, inclusive, se hace una pregunta para determinar cómo percibe la población colombiana sus capacidades para crear empresa. Y al ver en los antecedentes si contaban con familias emprendedoras, la conclusión fue que esta no es una condición determinante", dice Jiménez.

La encuesta se hizo a través del Centro Nacional de Consultoría. "Fueron 2.040 encuestas, de las 2.000 que se exigen como mínimo. No se aplicaron en mitad hombres y mitad mujeres, sino que abarcaron 1.100 mujeres", explica Jiménez y agrega que la presentación oficial en Colombia del 'Global Entrepreneurship Monitor Report on Women and Entrepreneurship Released' será en agosto.

Otras conclusiones generales del estudio

Los 41 países en donde se hizo el estudio representan más del 70 por ciento de la población mundial, y queda claro que aun cuando más mujeres ingresan al mercado laboral y la competencia entre géneros se ha equiparado con el paso del tiempo, es una realidad que a la hora de crear empresa ellas siguen en clara desventaja frente a los hombres: por cada una de ellas que es empresaria, hay dos hombres, señala el estudio.

Lo cierto es que, según Jiménez, el estudio reflejó la situación mundial en Colombia, especialmente en la encuesta del 2006, cuando la conclusión fue que 42 por ciento de los hombres eran dueños de una empresa naciente, frente a 24 por ciento de las mujeres.

Si bien es cierto que las mujeres, según el GEM, están en desventaja con respecto a los hombres, también lo es que en el 2007 -de acuerdo con el estudio- hubo una pequeña mejora frente a 2006 y la desigualdad es menor.

Lo claro es que sí hay países con un mayor nivel de actividad empresarial, como es el caso de Perú, Tailandia y Colombia. El problema es que esto se debe a que la gente tiene menos opciones de trabajo, "los países más desarrollados tienen un nivel de creación de empresas más bajo", dice Jiménez. "Y es que el GEM incluye solo 41 países del mundo, pero son pocas las naciones pobres que pueden hacer el estudio".

Hay países en los que las mujeres emprendedoras están en mejor situación, como el caso de Japón, donde todo cambia y, tal vez por su entorno cultural, son más empresarias, pues los hombres están más afianzados en el campo laboral. "Ellas salen poco a buscar empleo y prefieren no vincularse a ese mundo. Además, dan por sentado que no pueden salir a emplearse".

En Latinoamérica, prácticamente las cifras son similares: 14 por ciento para los hombres y 13 por ciento para las mujeres, desde que más han entrado al mercado laboral. Además, hoy ellas cuentan con programas que les dan apoyo específico a la hora de crear su propia empresa.

Pero ¿qué significa el emprendimiento? La actividad emprendedora es un fenómeno complejo que abarca una variedad de contextos. En el caso del GEM, se enfoca en el papel que desempeñan los individuos en el proceso emprendedor.

A diferencia de la mayor parte de las bases de datos subconjunto que miden empresas más nuevas y pequeñas, el GEM estudia el comportamiento de individuos con relación a la iniciación y gestión de negocios.

Ana María Gómez C. / Redacción de economía y negocios